Durante el verano y con el calor, la circulación de mosquitos y el riesgo de transmisión del dengue aumentan. Cómo evitar la propagación del insecto y qué hacer ante la presencia de los síntomas.

El dengue es una enfermedad viral que se transmite por la picadura del mosquito Aedes Aegypti infectado por alguno de los tipos de patología, que se manifiesta transcurridos entre 3 y 14 días de la picadura; y tiene como principales síntomas la fiebre alta, cefaleas, dolores musculares y articulares.

Este insecto se encuentra, mayormente, en climas tropicales y subtropicales de todo el mundo, principalmente en zonas urbanas y semiurbanas; y nuestro país no es la excepción. Por esto es que la llegada del verano y sobretodo de las altas temperaturas benefician la reproducción de este mosquito y la propagación de la enfermedad que puede afectar a cualquier persona.

¿Cómo impedir la reproducción del mosquito?

• Evitar las aguas estancadas alrededor de la casa
• No acumular agua en recipientes como baldes, floreros o macetas.
• Usar repelentes, principalmente durante horas de la tarde y de la noche.
• Colocar mosquiteros en puertas y ventanas.
• Mantener el tacho de basura cerrado.

Un diagnóstico inmediato y el acceso a una asistencia médica adecuada es el procedimiento más seguro para disminuir la tasa de mortalidad y ayudar a que el paciente sea tratado a tiempo para frenar el avance de la enfermedad.

Los principales síntomas son:

• Brotes o erupciones en todo el cuerpo
• Fiebre alta
• Fuerte dolor en los músculos y las articulaciones
• Inflamación de los ganglios
• Vómitos
• Náuseas
• Dolor alrededor y detrás de los ojos
• Dolor de cabeza muy fuerte
• Cansancio intenso

Ante cualquiera de estos indicios y la inquietud acerca de que la persona pudo haber sido picada por el mosquito, se recomienda recurrir a un profesional de la salud, quien realizará los estudios correspondientes para determinar el diagnóstico del caso.